Desde que nacemos experimentamos un sin fin de pequeños traumas, nos referimos a eventos, sucesos o episodios de alto estrés que nos ocurren de manera inesperada y no sabemos cómo actuar. ¿Quieres saber cómo superar un trauma?
Índice del artículo
Si te está costando llevar esta situación adelante… ¿Por qué no pedir ayuda?
Recupera el control de tu vida.
¿Te has preguntado que ocurre dentro de ti o en tu cerebro cuando has sufrido un evento traumático o una situación inesperada?
En este artículo de Be fullness, tu grupo de profesionales que te permiten crecer y ser mejor persona cada día, no encontraras solamente que es un trauma, sus causas y posibles soluciones, sino que vamos más allá y podras formar parte de la mejor comunicad para empezar a sanar, conocerte e interactuar con especialistas adecuados a ti.
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“Conocer tu propia oscuridad es el mejor método para lidiar con la oscuridad de las demás personas”
Carl Gustav Jung
¿Qué es un trauma?
Un trauma es la reacción de tu mente y tú cuerpo ante una situación que no esperas, es un choque emocional que paraliza tu psique consciente y la protege, bloqueando información.
Un trauma es un episodio, un ataque, una situación altamente estresante, una herida emocional.
Evento Traumático: Desde el punto de vista de un psicólogo
De acuerdo con diversas investigaciones, un evento traumático se caracteriza por:
- Ocurrir de manera inesperada o repentina para tu consciencia.
- Va más allá del control que puedas tener para afrontarlo o solucionarlo, esta acompañado de un sentimiento de impotencia o perdida de control.
- Cambia tú perspectiva o la realidad presente, puede ser extremadamente doloroso.
Según la clasificación internacional de enfermedades CIE-10 un trauma es una respuesta tardía a un acontecimiento estresante o una situación de naturaleza amenazante o catastrófica que causaría malestar generalizado en casi todo el mundo como:
- Pandemias.
- Catástrofes.
- Guerras.
- Accidentes graves.
- Ser testigo de la muerte violenta de alguien.
- Ser víctima de tortura.
- Terrorismo.
- Violencia.
- Violaciones o agresiones sexuales.
- Entre otras.
También pueden ser causados por experiencias de menor consecuencia como:
- Enfermedades graves.
- Desprotección.
- Humillaciones.
- Migración a otra ciudad o país.
- Robos.
- Una intervención quirúrgica.
- Una caída.
- Entre otras.
Los factores de riesgo van a depender de cada persona que viva el trauma, no se rige por un patrón recurrente, no todos los eventos o situaciones adversas generar trauma, no todas las personas que viven un eventos catastrófico experimentará un trauma.
La perspectiva, el razonamiento, la capacidad para resolver conflictos son factores determinantes e importantes, es por ellos que la OMS en la clasificación de enfermedades determinan de manera amplia los siguientes factores:
- Sexo.
- Edad.
- Escolaridad.
- Coeficiente intelectual.
- Etnicidad.
- Antecedentes personales.
- Reporte de abuso en la niñez o de eventos adversos.
- Historia familiar de enfermedades psiquiátricas.
- Severidad del evento traumático.
Se consideran en los factores la severidad del evento traumático sin embargo no es definitivo para identificar la gravedad del daño ocasionado, sino que va a depender de cada persona, su historia, su entorno, la etapa de vida, el momento en que se encuentre.
Los síntomas o manifestaciones de un trauma pueden aparecer de manera inmediata o de igual forma cuando pienses que “ya está superado” porque ha pasado un largo tiempo de haber ocurrido el evento traumático.
Para que puedas comprender aún más las características de una persona traumada, veamos cómo piensa una persona que ha sufrido un trauma y una que no ha sufrido un trauma:
Pensamientos de una persona NO traumatizada
- “Es poco probable que algo pueda ocurrirme”.
- “Si comprendo lo que sucede dentro de mí, estoy completamente seguro que cualquier situación que ocurra puedo afrontarla”.
- ¿Para que pensar siempre en que algo puede ocurrir?
- Soy una persona positiva y valiosa.
Pensamientos de una persona Traumatizada
- “Algo puede ocurrirme”.
- “Me siento vulnerable en este mundo tan hostil y pervertido”.
- “Todos estamos proclives a sufrir de un evento riesgoso”.
- “siento que si pasa algo inesperado y doloroso, no lo voy a poder soportar”.
La magnitud del daño ocasionado por experimentar un evento traumático va a depender de tu actitud, tu perspectiva o la visión que tengas de ti mismo y el mundo.
¿Qué ocurre en nuestro cerebro cuando hemos sufrido un trauma?
¿Recuerdas sucesos que te han ocurrido e identificas en que año, circunstancia o etapa de tu vida ocurrieron?
Cualquier suceso que no signifique un trauma o un daño es almacenado en tu cerebro de forma ordenada, asimilada como parte de tu ser y tu historia, es lo que identifica quién eres y que has vivido.
¿Qué momento agradable de tu infancia puedes recordar en este momento?
Este pequeño ejercicio sirve para que puedas comprender que lo has podido recordar identificando que sucedió en tu niñez, que puedes tomarlo y repasarlo de tu memoria consciente de manera voluntaria.
Y que si te pregunto: ¿Qué emoción experimentaste? Puedes fácilmente identificarla.
En cambio un trauma nubla la capacidad para afrontar cualquier situación de estrés o de adversidad, nuestra memoria traumática está dispersa en diferentes áreas de nuestro cerebro.
Para saber cómo superar un trauma hay que saber que dentro de nuestra psique no hay orden, ni tiempo cronológico, es por ello que los fragmentos o recuerdos se activan de manera involuntaria.
En cualquier momento se puede desencadenar y experimentar sensaciones, olores, sentimientos, vividos en el momento del evento o reacciones en respuesta como si estuviera ocurriendo en ese preciso instante, sintiéndolo real.
La ansiedad es la respuesta de nuestra psique ante eventos de peligro, nos permite huir o prevenir sucesos o acontecimientos de riesgo.
Cuando éramos seres primitivos, que vivíamos de la caza, pesca y recolección, la ansiedad era ese sentido de protección y sobrevivencia que actuaba en defensa ante amenazas.
En la actualidad este mecanismo de protección sigue estando con nosotros, lo único es que ya no debemos huir de osos, cazar animales salvajes o protegernos de climas extremos que pueden atentar con nuestras vida y nuestra mente no identifica cual es una amenaza y cual no es.
Es por lo que durante un trauma nuestro cerebro se ve afectado por el flujo de sustancias químicas que segregamos, en respuesta a esa amenaza y las funciones de almacenar, recordar, se ve afectada.
¿Después de un trauma nuestro cerebro vuelve a ser como antes?
Un mecanismo de densa de nuestra mente es intentar recuperarse tratando de pensar que nada volverá a ser como antes, ocasionando una pequeña ruptura en la realidad dándole entrada a la ansiedad o la fobia para “proteger tu sistema de próximas amenazas”.
Cuando ocurre un evento traumático, nuestra amígdala y el hipocampo sufren daños, imposibilitando generar las sustancias químicas segregadas ante un suceso de riesgo.
Es por ello que estímulos externos no amenazadores, sean asimilarlo como una amenaza o de alto riesgo.
Es importante resaltar es que a medida que sanemos, realizemos psicoterapia y contemos con un especialista calificado como los de Be fullness que pueden acompañarnos en el proceso, es mentira que estaremos rotos para siempre.
Mientras cuentes con la compañía de los mejores especialistas no serás la misma persona que antes, ahora contaras con un gran aprendizaje y una fortaleza inigualable que te permitirá sanar y ver lo que te rodea con armonía, objetividad y calma.
¿Qué ocurre en nuestra psique cuando pasamos por un trauma?
Cuando recién experimentamos un hecho traumático o cuando no hemos sanado adecuadamente y no contamos con los especialistas adecuados por lo general sentimos:
- Miedo.
- Insomnio.
- Nerviosismo.
- Enfado.
- Culpa.
- Desorientación.
- Angustia.
- Tristeza.
- Estrés.
Al aceptar la realidad tan cual es y se presenta, identificando lo que pensamos y sentimos, es el momento adecuado para sanar, dándonos el tiempo que requerimos, sin presiones, sin culpas, sin violencia intrapersonal (dentro de ti mismo) estas sensaciones irán disminuyendo.
Reacciones que tenemos cuando vivimos un trauma
Pesadillas recurrentes:
Nuestro cerebro, hasta en momentos de descansos se encuentra asimilando, procesando la información.
Revivir experiencias traumáticas:
Es como un círculo donde repetimos y repasamos una y otra vez la experiencia, buscándole explicación, sentido y razón al evento traumático.
Estrés, angustia y ansiedad:
Constantemente los pensamientos catastróficos invaden nuestros pensamientos, creemos que “algo malo ocurrirá” nuevamente.
Flashbacks:
Son recuerdos realistas del evento traumático a tal punto que la persona siente que lo está viviendo nuevamente.
Miedo:
Es una respuesta a los desconocido y a situaciones de alto riesgo, esta sensación a medida que va pasando el tiempo va disminuyendo.
Ira:
La sensación de rechazo, enojo, desacuerdo, necesidad de culpar a un externo por lo ocurrido genera episodios de ira y descontrol.
Tristeza:
Descargar por medio del llanto, sentirnos indefensos y desprotegidos es producto de lo amenazante, angustiante e inesperado del hecho.
Hacerlo permite el desahogo y la liberación de sentimientos y sensaciones encontradas.
Culpa:
Nos reprochamos estar en ese momento, estar vestidos como estábamos, actuar como lo hicimos, no haber hecho algo para prevenirlo.
LA CURIOSA PARADOJA ES QUE CUANDO ME ACEPTO TAL COMO SOY, ENTONCES PUEDO CAMBIAR
Carl Rogers
¿Cómo sobreponerte a un trauma?
Una de las manifestaciones presentes es el bloqueo de recuerdos, es por eso que para superar un trauma recomendamos lo siguiente:
Escribe:
Ten una agenda o libreta dedicada a ti, anota todo lo que puedas recordar, lleva nota de cada pensamiento y sensación que experimentes.
Esto permitirá que puedas leer como un espectador de tu propia experiencia y empezar a ver la situación de distintas perspectivas, facilitando la asimilación de toda la información que has vivido.
Conversa y cuenta tu experiencia:
El hablar o expresar los sentimientos te permitirá afrontar y asimilar la situación.
Al principio es normal que sientas pena o nerviosismo, posterior veras como cada vez que narras el evento o la situación lo haces con mayor fluidez, notaras que día a día sientes confort por afrontarlo y aprender de las situaciones dificiles.
Dibuja o realiza cualquier expresión artística:
El arte fomenta la expresión, la recuperación, facilita tu próximo contacto con lo social, el proceso creativo te convierte una persona sensible a lo que vives y sientes.
Una actitud ecuánime hará que sanes:
Mantener una actitud objetiva hará que puedas asimilar aceptar la realidad como se presenta, negar lo que está ocurriendo y sustituir un pensamiento positivo por uno negativo ocasionara que sigas negando lo ocurrido.
Lo mejor que puedes hacer es tomarte un tiempo para sanar para expresar lo que sientes, para ser espectador de tu propio cuerpo y mente.
Sé paciente y solo observa que ocurre, vuélvete un experto de ti mismo.
Acude a un especialista:
Cuando te duele un diente, acudes al odontólogo, cuando tienes una cortada superficial o algún dolor físico, vas al médico.
En esta oportunidad que tienes una herida emocional debes contar con el especialista adecuado, Un psicólogo, el apoyo de un especialista es la mejor decisión para empezar a sanar.
Si quieres saber cómo superar un trauma puedes contar con el equipo de Be Fullness. Eres importante y es sabio decidir sanarte de la mano de los mejores profesionales.
Actualmente a nivel mundial estamos pasando por sucesos adversos, dolorosos, incomodos, angustiantes que te hacen sentir preso o limitado, es normal sentir angustia, soledad, tristeza, ansiedad, desesperación en estos momentos, aceptar la realidad es el primer paso para sanar.
Lo que no es normal es permitirte no curar y no dejar ir estos sentimientos. Así que te invito a liberar esas emociones a través de la Escritura Terapéutica. ¿Te unes?
Una nueva etapa está por comenzar en tu vida, permítete perdonar, reponerte, seguir adelante, supera las pruebas y aprende de ellas, permítete salir a la luz con amor, paciencia y libertad.