La psicología es una de las ciencias de la salud mental que mayores implicaciones tiene para el bienestar y la calidad de vida de las personas. Desde mi propio ejercicio y también desde la observación, he podido ser testigo del potencial transformador para entender tus emociones, transitar procesos y en definitiva, sentirte más pleno. Pero entre todas las ramas y corrientes, la terapia transgeneracional resulta no solo novedosa, sino también muy profunda.
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Conoce la terapia transgeneracional y lo que dice de tu yo más profundo
La terapia psicológica tradicional o las sesiones de coaching han venido ganando espacio en los entornos sociales. Las personas somos cada vez más conscientes de nuestras emociones y de cómo su gestión nos afecta en todos los ámbitos.
Pero, ¿Qué ocurre cuando aquello que obstaculiza nuestro desarrollo o nos representa un problema, no tiene una explicación clara en el presente?
En la terapia psicológica podemos tratar asuntos de personalidad, de autoestima o de vínculos, cuyo origen pueda ser fácilmente ubicable en alguna situación de la vida del paciente. Pero también nos topamos con casos en los que la persona expresa sentir y padecer determinada cosa, desde que tiene memoria.
Pareciera entonces que se trata de algo que viene de más allá de la propia vida. De asuntos que han quedado sin resolver y que pueden estar siendo heredados. Básicamente éste es el objeto de estudio de la terapia transgeneracional. Acompáñame a profundizar en ello.
¿Qué es la Terapia transgeneracional?
¿Has escuchado hablar alguna vez del árbol genealógico transgeneracional? Pues se trata del concepto básico sobre el que funciona esta clase de terapia. La psicología transgeneracional se fundamenta en el hecho de que los problemas que una persona presenta, parecen no fundamentarse en sus interacciones de la vida presente, sino rastrearse hasta un pasado muy remoto.
El terapeuta puede acompañar al paciente, hurgando hasta los primeros años de su niñez, e incluso yendo a momentos como la gestación, el embarazo y la vida de sus ancestros. Como ves, no se trata de una visión conservadora de la psicología, sino de un formato que apuesta a tener una mirada más profunda del yo interior de cada individuo.
La perspectiva que sustenta la terapia transgeneracional defiende que las personas no solo estamos influenciados por las cosas que nos pasan en la vida, sino también por las vivencias de nuestros ancestros, en especial los momentos difíciles, de traumas o de sufrimientos que pudieron ser almacenados en la memoria como traumas.
Un ejemplo de conflicto transgeneracional
Para ilustrarte el planteamiento, me permito invitarte a que imaginemos juntos un escenario hipotético:
Imagina que un buen día, una mujer decidió casarse y formar una familia. Pero aquella unión no resultó como ella lo imaginó. Su compañero terminó siendo un hombre desconsiderado, maltratador, que le era infiel con frecuencia e incluso llegaba a violentarla físicamente. Esa mujer entonces grabó en su inconsciente que los hombres son malos y peligrosos, y que por lo tanto, más vale cuidarse de ellos.
Entonces, generaciones después, vemos una familia en la que las hijas, nietas y bisnietas de esa mujer tienen grandes problemas para consolidar una pareja. Tienen tendencia a las relaciones con personas difíciles, sufren abandonos, maltratos, infidelidades o divorcios.
Lo que se percibe es un patrón que se repite, que fue iniciado por la primera mujer de la historia como un método de supervivencia. Como su experiencia en pareja fue nefasta, su inconsciente entendió que para sobrevivir debe cuidarse de los hombres, y esa lección la transmitió a su descendencia.
Este ejemplo es tan solo uno de los miles de casos en los que la terapia transgeneracional visibiliza asuntos que tienen que ver con el árbol genealógico transgeneracional. Si alguna de estas ideas resuena en ti, ¡Sigue leyendo! Veremos de qué manera se aplica este modelo y qué beneficios puede representar para tu bienestar integral.
¿Cómo se trabaja la terapia transgeneracional?
Asumir la decisión de realizar terapia transgeneracional implica un compromiso contigo mismo de altísimo nivel. Se trata de un reto en el que tendrás que estar dispuesto a hurgar en lo más profundo de tu historia familiar, con todos los elementos dolorosos que puedan surgir de ello. Existen diferentes técnicas que pueden implementarse en este tipo de terapia. Veamos las más conocidas:
El árbol genealógico o árbol transgeneracional
Dentro de la terapia transgeneracional, esta es una de las vertientes más utilizadas y de las neurálgicas. La idea es hacer el árbol genealógico de tus antepasados, tratando de llegar hasta la cuarta generación. En él indicarás todo lo que sepas sobre sus vidas, cómo eran, qué sucesos los marcaron, cómo era su personalidad y cómo se condujeron en determinadas situaciones.
Es un abordaje en el que se apunta a la herencia epigenética. Así como la genética determina asuntos como el color de ojos o de cabello, la epigenética aborda asuntos relativos a la personalidad o la manera de ser.
La línea temporal emocional
Esta es otra técnica muy útil dentro de la terapia transgeneracional, que se ubica en los primeros años de la vida del individuo. El terapista conduce a la persona a que se remonte en sus recuerdos, tratando de llegar hasta los tres o cuatro años, que es la edad en la que empezamos a tener conciencia sobre ellos.
Allí el enfoque va en ubicar esas experiencias, problemas o situaciones que pudieron quedar grabadas en el inconsciente, generando traumas y afectando su estado emocional y sus conductas y decisiones futuras.
El Proyecto Sentido
Y la última de las técnicas de terapia transgeneracional de la que quiero hablarte es del Proyecto sentido. Se trata de un método que fue desarrollado por el psicólogo francés Marc Fréchet, y que consiste en profundizar en todo lo relativo a la concepción, la gestación, el parto y las experiencias de la persona durante sus tres primeros años de vida.
Se pone especial foco en las emociones que se vivían en la madre y en el entorno en el que ese bebé llega al mundo, considerando que tienen influencia y se quedan grabados en ese pequeño ser de manera inconsciente.
¿Qué clase de problemas puede abordar la terapia transgeneracional?
La terapia transgeneracional en general se indica cuando una persona siente que tiene un problema, un bloqueo, un obstáculo en algún área de su vida, al que no logra encontrar un origen en su presente. Algunos de los temas que se abordan con más recurrencia en esta clase de terapia son los siguientes:
- Conflictos de pareja o de relaciones con el sexo al que la persona sea afín.
- Conflictos familiares, con nuestros padres, hermanos o hijos.
- Dificultades en las relaciones con otras personas.
- Dificultades para afrontar los cambios que la vida nos pueda presentar.
- Adicciones al alcohol, las drogas o de cualquier otro tipo.
- Enfermedades o problemas físicos.
- Sucesos trágicos como muertes prematuras, abortos, asesinatos, o duelos difíciles.
- Abuso sexual.
¿Qué tiene que ver con las Constelaciones familiares?
Y de la mano con la terapia transgeneracional, surge un método que ha venido ganando espacios en los últimos años, y cuyos beneficios para el bienestar de quienes lo aplican es de gran valor. Lo controvertido de las constelaciones familiares es que no hay evidencia científica que las avale. Sin embargo, el crecimiento de su práctica hace que se convierta en una alternativa digna de análisis.
Este método fue desarrollado por el filósofo y pedagogo Bert Hellinger, con la intención de sanar y reorientar las relaciones en el seno de una familia, así como explicar y superar arrastres o problemas para los que la persona no encuentre una explicación concreta.
Cómo funcionan las constelaciones de Bert Hellinger
Las constelaciones familiares pueden realizarse en sesiones individuales. Lo más común es que se hagan en talleres grupales, en los que la persona que va a constelar elige a otras para que representen a su madre, padre, abuelos o demás miembros de la familia que desea que participen en su constelación.
El terapeuta irá guiando los movimientos del grupo, aportando frases o pensamientos que ayuden a la persona a identificar las problemáticas presentes y alcanzar una solución. El objetivo de la terapia es que la persona perciba sus implicaciones en su familia, supere traumas o situaciones del pasado y en general alcance un mayor nivel de bienestar.
Se trata de un método que guarda relación con lo que conocemos como psicología sistémica. Esta corriente es un enfoque terapéutico en el que se abordan los trastornos o problemáticas de un grupo social, al que se analiza como un sistema humano. Entonces, se pone el foco en revisar y mejorar las interacciones entre los participantes de este sistema.
¿Quieres probar una sesión de terapia transgeneracional y descubrir las heridas de tu alma?
En definitiva, la terapia transgeneracional es un enfoque muy interesante, que viene a arrojar luces en aquellos problemas, traumas o situaciones a los que no encontramos una explicación precisa. Bien se dice que somos energía, y esa energía la intercambiamos con los demás de manera permanente.
Ese viaje inicia en nuestra concepción y nacimiento, se influencia de los sucesos que han vivido nuestros ancestros y se construye con nuestras propias vivencias. Es un enfoque profundo y trascendente, que lleva a quien decide vivirlo a explorar en su yo más profundo.
Si te interesa este tema y sientes que puede representar un aporte a tu bienestar y calidad de vida, te animo a reservar una sesión de Terapia Transgeneracional Conmigo, en la que podrás ver todos estos conceptos bajo la óptica de tus propias experiencias. ¡Te espero!
